Le cuestionamos el porqué de su condición. Ni él mismo logra disipar sus dudas. En estos casi 20 de soledad, solo unos
cartones y una viejita carpa rota hacen de su morada. Unas leñas, un fósforo,
un puñal y unos cubiertos en mal estado son su riqueza.
Enrique quiere partir en busca de su pasado. Dice
querer ver y abrazar a esa familia que un día tuvo. Solo quiere un poco de
impulso, un aventón, un "¡Anda hombre, tú puedes!”, y para ello pide su DNI.
En un recorrido itinerante, nuestro registrador de la GRIAS Chiclayo, Daniel Guerrero, conoció esta historia y visitó la morada del indefenso hombre, donde lo encontró solo, viejo, sin familia, sin alimentos, sin medicinas que calmen
sus dolores, y sin documento nacional de
identidad.
Por eso, Daniel hizo una búsqueda en los archivos de Pomalca, Tumán, Picsi, Chiclayo y no encontró rastro del nacimiento de Enrique. Con asistencia registral logró la inscripción extemporánea de nacimiento del anciano y luego, tramitó su DNI.
Enrique indica que con su documento de identidad tratará de recuperar parte de la vida que perdió.
Historia de Daniel Guerrero, registrador
itinerante de la GRIAS Chiclayo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario